
Los nadadores usan las líneas de los carriles de natación para reconocer dónde están en el agua. Deben poder realizar un seguimiento de su progreso mientras nadan, y mirar rápidamente los colores en las líneas de los carriles es una forma de hacerlo.
Astralpool desarrolló y patentó sus propias cuerdas de carril, un importante avance tecnológico en las piscinas de competición ya que consigue la máxima absorción de las olas creadas por los nadadores, ayudando a que la superficie del agua sea lo más perfecta posible.
Mostrar más
Mostrar menos